Reconozco que yo he sido una persona con mucha tendencia a idealizar y luego cuando se me ha puesto delante la situación de conocer a la persona en profundidad, me he dado cuenta de que la persona real detrás de lo que a mi me han podido mostrar en redes sociales, realmente, no me interesa. Esto está bien saberlo para realmente valorar lo que a ti te llama de una persona. Y es que a mi me gusta que me aporten.
Durante la charla fui recordando estas cosas, y comparando a unas y otras personas que he tenido la buena suerte de que se crucen en mi camino.
En brujería es muy fácil hacer creer a los demás que tienes mucho conocimiento gracias a la ley del secreto, aunque realmente no sea así. Y es que, todos tenemos la imagen del gran mago que se ha pasado años en una cueva conviviendo con múltiples espíritus que le han revelado tantas verdades que sería imposible contarlas todas y de la bruja misteriosa rodeada de oráculos, olores exóticos y libros de diferentes culturas que te mira de reojo como si antes de que tú abrieras la boca, ella ya te conociera.
Muy bien amigxs, pues la experiencia me ha enseñado que todo esto es teatro.
Desde mi experiencia: Al final te encuentras con que las personas que menos cuidan su imagen para centrarse en su contenido (que suele ser racionado de cierta manera, por que están ocupados con la realidad, por ejemplo, poca presencia en stories ya que en el día a día hay mucho que hacer), suelen las que más pueden aportarte a nivel humano. Aquí no me refiero a escuelas, me refiero a brujos del día a día.
Pero más importante que todo esto, es conocer a las personas que se muestran con naturalidad, independientemente de lo mucho o poco que les guste mostrarse en Internet. Esto es una cualidad, son pocas las personas que pueden ponerse delante de un desconocido sin una máscara.
Al final comprendes que el verdadero ser humano que puede aportarte es aquel que se conoce, que se siente seguro ante la idea de que le conozcan, que ha trabajado internamente desde su devoción al mundo mágico y que, con los datos e historias que todos tenemos a nuestra disposición, ha emprendido el camino del crecimiento personal, que no el social. "Soy lo que soy, tengo lo que tengo y me muestro como tal. Acepto mi edad, mi físico, mi mente y mi actitud y por ello, nos doy la oportunidad de conocernos y crecer juntos."
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