Hades el verdadero dios filantropo.


Escribo esta entrada desde mi experiencia, hace ya mas de dos meses que Hades se acercó a mi (por que seamos honestas, nosotras no elegimos, ellos nos llevan a su encuentro). Él me enseñó que siempre tienes la capacidad de protegerte, aunque no sepas de donde viene el dolor.


Hades es en la mitología griega el dios que gobierna el inframundo, un dios necesario para el equilibrio al que con frecuencia retratan (desde mi experiencia muy erróneamente) como un hombre al que en realidad las almas "le importan un comino". 

Pero, mirando un poco más allá ¿Qué es el inframundo? ¿Qué es lo que Hades guarda?
El inframundo es la sombra, el lugar donde esperan las emociones que no comprendes o que a veces ni si quiera reconoces, es el lugar donde tus miedos e inseguridades se crean, donde acudes para comprenderte un poco mejor y conocer el por qué de tus bloqueos, donde se guardan los recuerdos de la vida, desde donde puedes comprender todo lo que ha motivado a lo que sucede y lo que sucedió y si eres un poco observadora, podrás vaticinar lo que vendrá.

Hades guarda y protege todo aquello que no está preparado para salir a la luz, Hades guarda tus miedos más íntimos, tus recuerdos mas dolorosos, la primera herida de tu corazón de niño. Y también tus sentimientos desbordados, sentimientos que te hacen perder el control y proteges con recelo.

"La despedida" Abigail Larson
Hades es el padre que te arropa en su manto y con un seguro y profundo "Shhh" te trae paz, paz de que tus emociones no van a ser dañadas bajo sus brazos, paz de la confidencia de tus dolores más íntimos, los dolores, tensiones y miedos de tu útero se encuentran en el río de almas de Hades. Hades ama desde la acción, Hades no necesita cara para mostrar una sonrisa, su presencia y tu aceptación de este dios como lo que es un dios que acude a los que se encuentran débiles, un dios que se agacha y te rescata cuando tú, atemorizada no sabes como salvarte a ti, a tu alma y a tu mente de tus emociones de todo aquello que nace o se lanza desde la oscuridad para dañarte, de la oscuridad de tu espalda, esa oscuridad similar a la imagen de un océano sin fondo, cuando te sientes desprotegida, vulnerable, perdida o débil, Hades cierra sus brazos, te acuna y te lleva con él a descansar. 

Y a recuperarte.

Hades es hombre, si Hades fuera una diosa benevolente actuaría desde la demanda, le rogarías y vendría una y otra vez a ayudarte, incluso sin que la llames.
Hades te enseñará desde el primer momento que eres fuerte, Hades te mostrará que estás a salvo y cada día que camines a su lado aprenderás a hacer en ti lo que Hades hace en el inframundo:

Proteger tu esencia. Tu mente, corazón y alma cogerán fuerza y vigor como lo hacen los pájaros que van al sol. Hades es la defensa consciente del inconsciente. Hades no es la muralla que impide la entrada a la luz, Hades es la puerta que se abre conscientemente cuando estás preparada para disfrutar del día.
Hades es el amor desde un muy consciente poder sagrado masculino, sin agresividad y sin cortejo, no lo necesita. Hades actúa, enseña, protege y repite.

Hades frente a Perséfone
Hades es sin duda un dios especial que desde mi punto de vista representa el amor altruista, Hades hace lo que hace por que puede hacerlo, por que reconoce la necesidad del mundo de nutrir su
personalidad y fuerza mental. No espera ni exige nada a cambio, la única muestra de indiferencia de Hades es hacia su propio olvido, hacia el comportamiento infantil de aquellos que dicen que el inframundo es un lugar horrible y Hades el monstruo que con indiferencia mira las almas precipitarse por el río de las lamentaciones. Obviando la bondad de Hades, obviando que Hades sobretodo es viejo y como viejo es sabio. Y los sabios, ante todo saben dos cosas:

1. Cuando no actuar.
2. No dar importancia a quien habla sin saber.

Hades se agachará a las orillas del río y cogerá tu mano cuando tú estés dispuesta a salir de él para no volver a entrar. Y juntos veréis los principios de tu oscuridad y creareis de la mano la ventana que te permitirá ver tu realidad, la de verdad, la que no esperabas y solo dolerá si no tienes la humildad de admitir tus errores, como pasa siempre con la sombra.

Pero Hades no es juez, verdugo, ni carcelero, Hades es, sin duda alguna, el maestro de la humildad, empoderamiento e individualidad en la evolución personal y espiritual.

Me dejo mucho, mucho por hablar de este gran maestro y compañero, sobretodo queda mucho del amor hacia él, pero quiero dejar que pase el tiempo para poder contar la evolución desde dentro.

Lo más importante es saber, que cuando flaquees, Hades siempre estará ahí no para consolarte, si no para comprenderte y juntos, alzarte.

Ciclo de introspección de Perséfone y Hades.



En la imagen: Thanatos y Perséfone

Texto: Hades y Perséfone

-¿No te asusta mi oscuridad, mi amor?
-No -Dijo Perséfone-. Tú aún no has visto la mía.



Mucho, mucho amor.

Syri.

Comentarios

  1. Me has dejado de piedra, porque, ya llevo un año trabajando con él, y sabes que no hablo mucho de ello, soy muy criptica con esto, pero todo lo que has dicho es lo que pasa por mi mente, refleja las experiencias que he tenido, hasta las imágenes que has puesto, son como yo lo veo, es que me he sentido completamente identificada. Que gran entrada, me ha encantado.

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  2. Lo único que me sorprende es "sin seducción". Tal vez porque yo conocí primero a Hades-Dionisios, el Hades que seduce. Si, no es una seducción muy ... Activa. Saduce con su mera presencia y no necesita aspavientos. Pero seduce.
    Conmigo funcionó

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